La CNMV quiere una ‘Big Four’ en el concurso de Abengoa.

EY y KPMG están entre las favoritas de la selección de candidatos que la CNMV presentará al juez para que se ponga al frente de la empresa.

EY y KPMG son dos de las cuatro grandes auditoras mejor posicionadas para ponerse al frente de Abengoa como administrador concursal. Así lo aseguran fuentes cercanas al concurso de acreedores en la que está inmersa Abengoa SA, matriz del grupo.

La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) cierra hoy el proceso de recepción de candidaturas que deben presentar los interesados en ser administrador concursal del grupo, con sede en Sevilla. La intervención de la CNMV en este asunto se debe a que Abengoa es una empresa cotizada.

Tras recibir propuestas de potenciales interesados, el organismo regulador debe presentar una terna de candidatos al juez que tramita el concurso, Miguel Ángel Navarro, titular la sección tercera del Tribunal de Instancia Mercantil de Sevilla.

Incompatibilidades

Éste deberá elegir uno. En el auto en el que declara el concurso, el juez advierte que dadas las deudas de Abengoa con la Agencia Tributaria, no se descarta una administración concursal «dual», con participación del Estado.

Por la complejidad del concurso de Abengoa (6.000 millones de deuda, de los que 1.200 millones son con 7.000 proveedores), la CNMV, presidida por Rodrigo Buenaventura, es partidaria de que en la terna haya al menos una de las cuatro grandes auditoras en España, las denominadas Big Four. El problema es que dos de ellas, Deloitte y PWC, tendrían incompatibilidades. Deloitte fue la firma que auditó las cuentas de Abengoa durante varios años hasta 2017. PWC auditó a la compañía en 2018, último ejercicio en el que el grupo presentó cuentas auditadas.

La CNMV, por otra parte, tiene que decidir si KPMG incurre en incompatibilidad. El pasado año, KPMG estuvo realizando un trabajo de valoración de activos para Abengoa en la negociación del plan de refinanciación. Este plan finalmente no salió adelante, lo que llevó a la matriz a su actual estado de insolvencia. KPMG fue en su momento el administrador concursal de Martinsa-Fadesa, la mayor liquidación de una empresa española hasta el momento.

Ese plan giraba en torno a la refinanciación de Abenewco 1, la filial de Abengoa donde están todos los activos valiosos del grupo y el grueso de los contratos con clientes y empleados. Intentar reactivar ese plan es uno de los retos financieros y jurídicos del concurso. Legalmente, la empresa que ha entrado en quiebra es Abengoa SA, pero no las filiales, como Abenewco 1. Por ahora, el juez que tramita el concurso de Abengoa SA ha intervenido esta empresa, pero no la filial, que sigue operando con su antigua dirección. La duda es si en algún momento el juez también intervendrá Abenewco 1. Por ahora, ésta sigue intentando salvarse por su cuenta.

El pasado miércoles, a última hora de la tarde, Abengoa explicó a la CNMV que ha llegado a un acuerdo con los proveedores para extender hasta el 31 de marzo el límite para alcanzar un acuerdo de refinanciación de Abenewco 1. Si ésta logra sacar adelante un plan financiero por su cuenta, se libraría de entrar en concurso de acreedores y posiblemente de la liquidación, como le ocurrirá a la matriz Abengoa SA.

Según explicó Abengoa, los proveedores han apoyado mayoritariamente conceder una prórroga extra a Abenewco 1. Sólo un 0,17% de los acreedores ha votado en contra.

Presión extrema a la Sepi

Fuentes cercanas al concurso interpretan este anuncio como una forma de extremar la presión hacia el Gobierno para que, como ha hecho con Duro Felguera y otras empresas, acuda al rescate de Abengoa a través de fondos del holding estatal Sepi.

Abengoa ha dicho «estar trabajando en una solución», de refinanciación para Abenewco 1, para lo que ha entablado «conversaciones y negociaciones con instituciones públicas y entidades privadas». La ministra de Industria Reyes Maroto, ha asegurado que el Gobierno «está trabajando» para poder rescatar a Abengoa.


Fuente: Expansión.