Los mercados inician la semana sin grandes referencias, a la espera de las citas clave de las próximas jornadas. El Ibex, sin apenas apoyos alcistas, vuelve a atascarse por debajo de los 9.100 puntos.

Los mercados respiraron con alivio el pasado viernes al conocer las cifras de empleo de Estados Unidos. Sin apenas resultados empresariales, los focos se desplazan hacia otro dato clave para calibrar las opciones de un cambio de ciclo en la política monetaria de la Reserva Federal. El próximo jueves se publicará el dato de inflación, correspondiente a mayo, con los analistas expectantes tras el brusco repunte registrado en abril. La publicación del IPC coincidirá con la reunión del Banco Central Europeo, si bien los plazos barajados para un repliegue de los estímulos monetarios en Europa auguran más retraso que al otro lado del Atlántico.

El arranque de la semana ya ha deparado algún dato macro relevante, como el máximo en diez de las importaciones de China, debido en gran parte al rally en los precios de las materias primas. En Alemania los pedidos industriales han sorprendido con una inesperada caída en abril, del 0,2%, frente al aumento del 1% previsto.

A la hora de calibrar sus ajustes de carteras, los inversores no pasan por alto dos novedades significativas en forma de estímulos e impuestos. Por un lado el acuerdo en el marco del G7 para establecer un impuesto global de sociedades, con un mínimo del 15%, y por otro, los planes de inversión multimillonaria del Gobierno de Joe Biden en infraestructuras.

La cautela persiste en la renta variable. Wall Street no registra cambios significativos en los futuros, y la sesión en Asia ha reducido al mínimo las variaciones en Japón y en China. La jornada traslada nuevas dosis adicionales de tensión sobre el suministro de chips, debido a las consecuencias del brote de coronavirus detectado en Taiwan, una de las mecas de la industria de chips.

La renta variable europea vuelve a enfriarse, y la Bolsa española mantiene activado el freno. La semana pasada truncó una racha de siete semanas consecutivas de subidas, con eléctricas , turísticas y renovables tomando el relevo en los descensos. El Ibex se afianza hoy por debajo del nivel de los 9.100 puntos, a la espera de mayores referencias.

El Ibex apenas encuentra apoyos relevantes para reinstaurar las subidas. En el capítulo de recortes destaca la inclusión de varios bancos, en una jornada en la que los analistas de Jefferies auguran rumbos bursátiles muy diferenciados, incluso opuestos, en el sector.

Empresas de renovables como Solaria y Siemens Gamesa sufren para cortar las caídas de finales de la semana pasada, y empresas turísticas como IAG mantienen activado el freno en Bolsa a la espera del resurgir del turismo británico. La aerolínea acusa además la incertidumbre que genera en Reino Unido la propagación de la variante india del Covid.

El resto de Bolsas europeas también activa el freno, con índices como el paneuropeo Stoxx 600 y el Dax alemán a un paso de sus récords históricos. El inesperado descenso en el dato de pedidos industriales en Alemania no ayuda a recobrar el optimismo, aunque al mismo tiempo enfría las perspectivas de un cambio de ciclo por parte del BCE, que se reunirá este jueves.

Las nuevas noticias preocupantes procedentes de Taiwan sobre la escasez de chips eleva la incertidumbre sobre el suministro a uno de los sectores estrella de 2020 en la renta variable europea, el automovilístico. En la Bolsa de Londres petroleras y mineras corrigen parte de sus últimas subidas ante el freno en el rally del mercado de commodities. La jornada en la Bolsa de París activa el freno en Carrefour, que ha decidido abandonar la alianza en compras suscrita con Tesco. Las acciones adquieren un signo más positivo en la también francesa Edenred, impulsada por la recomendación de ‘comprar’ emitida por los analistas de Deutsche Bank.

La agenda de la semana concentra en el jueves dos de las citas más esperadas: el dato de IPC de EEUU y la reunión del BCE. De momentos, las tensiones inflacionistas permanecen contenidas.Los intereses de la deuda cotizan por debajo del 1,60% en EEUU, después del alivio que supuso el dato de empleo del pasado viernes. En Europa, las tasas negativas de interés rondan el -0,20% en el bund alemán, y el interés del bono español se enfría al entorno del +0,45%.

La tregua se extiende al mercado de divisas, a la espera en gran medida de las referencias del jueves. El euro repite en 1,21 dólares, y la libra en 141 dólares. En el mercado de criptomonedas vuelve a prolongarse el freno del bitcoin, bloqueado en el nivel de los 36.000 dólares. Un activo más tradicional como el oro intenta mantenerse cerca de los 1.900 dólares la onza alcanzados la semana pasada con sus subidas.

Uno de los focos de tensiones inflacionistas, el mercado de materias primas, consolida sus últimos avances. El precio del petróleo aguarda novedades sobre un posible levantamiento de las sanciones contra Irán con un freno. El barril de Brent se repliega a 71 dólares desde zona de máximos de dos años, y el barril tipo West Texas, de referencia en EEUU, se enfría a 69 dólares.

Fuente: Expansión.